TIERRA DE CIERVOS / LAND  OF  DEER 

(English below) 



El día cuatro de mayo de 2016 viajé a la ciudad de Baotou en la Región Autónoma de Mongolia Interior al Norte de China. En las afueras de la ciudad hay un lago artificial de una superficie de 26 km2 que contiene lodos residuales tóxicos y radioactivos; todo su perímetro está bordeado por tuberías que llevan un torrente de desechos de las refinerías de los alrededores.

El olor es espeso y hay una capa de algo en el aire.


Baotou es una región rica en un grupo de elementos químicos conocidos como "tierras raras"; estos minerales son fundamentales para los componentes electrónicos de los teléfonos inteligentes, tabletas, receptores GPS y turbinas de viento, generando toneladas de residuos por año y como consecuencia graves problemas de salud entre la población local.

El dique circular tiene una capacidad de 236 millones de m3 para alojar los elementos radioactivos del consumo del mundo. Mientras estaba filmando me detuvieron y me interrogaron por dos horas hasta que vino Seguridad Nacional. Cuando llegaron me trasladaron al hotel donde me estaba hospedando, revisaron toda mi habitación y me hicieron borrar por completo el material que había filmado. Incluso formatearon la tarjeta de memoria para que no pudiera recuperar las fotos.


Pensaban que era una espía.


Me dijeron que el “lago” donde había estado filmando es un “Lugar sensible” y que mi presencia ahí generaba sospechas.

Después de seis horas me dejaron ir. Al día siguiente me fui a otra ciudad a unos doscientos kilómetros y ahí también me esperaba Seguridad Nacional. Me hicieron las mismas preguntas que ya me habían hecho. Entraron a mi habitación y revisaron todo.

Después de una hora me dejaron ir.

Todavía no sé cómo una sola foto quedó almacenada en lo más profundo de la memoria de mi tarjeta flash, como un fósil amarrada a algún fallo energético.


Baotou significa en Mongol “Tierra de ciervos” pero es casi imposible imaginar que alguna vez en ese paisaje correteaba algún ciervo, o que donde ahora está el lago de lodo tóxico, se extendía una llanura de campos verdes donde plantaban sandías, berenjenas y tomates.




On May 4, 2016, I travelled to the city of Baotou in Inner Mongolia Autonomous Region, situated in North China.
In the suburbs of the city, there is an artificial lake of 16 km2 containing toxic and radioactive sludge; its perimeter is bordered by a stream pipes carrying waste from the refineries that surround it.
The smell is thick and there is a layer of something in the air.
Baotou is rich in a group of minerals known as "rare earth"; these are essential for building electronic components of smartphones, tablets, GPS receivers and wind turbines; generating tons of waste per year and resulting in serious health problems among the local population.
The circular dam has a capacity of 236 million m3 to accommodate the radioactive elements of the world consumption.
While I was filming I was arrested and interrogated by National Security for six hours. They made me erase all the material I had filmed and they even formatted the memory card so I could not retrieve the photos.
They thought I was a spy.
I still don't understand how a single photo was stored in the depths of my flash memory card, such as a fossil tied to a power failure.
Baotou means in Mongolian "Land of deer" but it is almost impossible to imagine a group of deer jumping around in that landscape.
People from the area who used to be farmers still can remember the watermelons fields, eggplants and tomatoes that used to grow where the toxic lake stands now.

I have only one photo and a video I took with my phone hidden while I was being interrogated.
Using Format